Al menos 51 personas, entre ellas un niño de 6 años, perdieron la vida en medio de un ataque de Rusia contra la región de Groza, al sureste de Járkiv

Las personas fallecidas se encontraban en el velorio de un habitante de la zona cuando impactó un misil a las 13:15 hora local.

El Ministerio de Defensa ucraniano confirmó que en la localidad no se encontraban objetivos militares, sólo habían civiles.

Por su parte, el dirigente regional de Járkiv, Oleh Synyehubov, calificó esta acometida como uno de los “crímenes más sangrientos” en la localidad.

Declaró que todas las víctimas eran habitantes de la aldea, que en el 2020 contaba con una población de alrededor de 501 personas. Eso quiere decir que el ataque ruso acabó con el 10% de su población.

“Habían personas presentes de todas las familias, de todos los hogares”, confirmó el Ministro del Interior de Ucrania, Ihor Klymenko.

El distrito de Kúpiansk (del que es parte la localidad) se ha mantenido en primera línea de las guerras entre el ejército ruso y ucraniano, desde que Vladimir Putin lanzó su invasión a gran nivel en febrero del 2022.

Al inicio de la guerra era un sustancial centro de abastecimiento para el ejército rusa, pero Kyiv lo recuperó en septiembre del año pasado después de meses de enfrentamientos.

El presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, calificó esta agresión como un “brutal crimen ruso”.

“Rusia necesita este y otros ataques terroristas similares para una sola cosa: hacer de su agresión genocida una nueva norma para el mundo”, escribió en la red social Telegram.

Europa no puede sustituir a Estados Unidos

El ministro del Interior afirmó que en el ataque se usó un misil Iskander, pero aún no se ha podido confirmar de manera independiente esta afirmación.

Rusia procedió a atacar la zona cuando Zelensky acudía a la cumbre de líderes europeos en Granada (España).

En ese entonces, el encargado de Asuntos Exteriores de la Unión Europea, Josep Borrell, aclaró que los combates políticos internos estaban amenazando la capacidad de Estados Unidos para financiar a las fuerzas ucranianas.

Un reciente convenio presupuestario en el Congreso de Estados Unidos no comprendía financiación para Ucrania.

Borrell confirmó que ninguna nación europea podría llenar el vacío que dejó la pérdida de apoyo estadounidense.

“¿Puede Europa llenar el vacío dejado por EE.UU.? Efectivamente, Europa no puede sustituir a EE.UU.”, dijo.

Este jueves, Zelensky solicitó a los líderes europeos más misiles de defensa antiaérea y añadió que otros países podían agradecerle a Ucrania que les protegiera del ataque ruso.

EE.UU. y la UE prometen más apoyo a Ucrania tras el mortal ataque de Groza

Otro ataque ruso que destruyó varios edificios residenciales de Járkov, en el noreste de Ucrania, también dejó a un niño de 10 años muerto y 23 personas heridas, así lo confirmó el ministro del Interior.

En este sentido, varios líderes mundiales manifestaron sus condolencias y condenaron el cruel ataque de Groza. En la Unión Europea y Estados Unidos, los políticos recalcaron que esta fatalidad es una muestra de que Ucrania requiere más ayuda. 

El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski confirmó que el ataque aéreo que demolió un café y una tienda fue intencionado, puesto que “los militares rusos no podían desconocer dónde estaban atacando”.

Por otro lado, el jueves por la noche, Ucrania confirmó que derribó en todo el territorio 25 de los 33 drones de ataque lanzados por Rusia, que realiza bombardeos todos los días en horas de la noche contra su vecino.